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TEMA 1. LA EDAD MEDIA: HISTORIA, CRONOLOGÍA, LENGUA Y LITERATURA Esquema general del tema 1. La Edad Media en España: historia y contexto 1.a. Cronología y periodización 1.b.Sociedad y cultura 1.c. Religión 2. La Literatura medieval 2.1. Concepto y delimitación 2.2. Oralidad y escritura 2.3. Orígenes e influencias: literatura latina, literatura romance, otras influencias Bibliografía básica para elaborar el wiki Manual básico: VVAA, Historia de la Literatura Española, Madrid, Everest, 2005 (u otras ediciones), capítulos I.1-I.3, I.6, I.7, I.9. VVAA, Manual de Literatura Española, vol. I, ed. Cenlit, cap. 1. (disponible en la plataforma) Ramírez Vaquero, Eloísa, “Introducción al mundo medieval hispánico”, E-Excellence, 2006, en http://www.liceus.com/cgi-bin/aco/areas.asp?id_area=13 Precio: 1 euro. Haro, Marta, aul@ medieval: http://parnaseo.uv.es/@Medieval.html apartado “Coronas medievales: Castilla y Aragón”. (acceso libre en la web) López Estrada, Francisco, Introducción a la Literatura Medieval Española, Madrid, Gredos, 1983. Cap. III, IV, VIII (disponible en la plataforma). VV.AA, Historia de la Literatura Española, Cátedra, Madrid, 1990, pp. 1-115. Introducción al tema En este tema se tratará el período medieval como período histórico que condiciona la producción literaria de la época en nuestra Península. Para ello, se tendrá en cuenta en primer lugar el marco histórico del momento y los aspectos fundamentales de los principales reinados, centrados en la gran monarquía de Alfonso X “El Sabio” como rey impulsor de las letras, de las traducciones y del desarrollo de la prosa medieval. En el segundo bloque, se verá la evolución de la literatura desde sus más tímidas apariciones en glosas y fragmentos, hasta los restos de oralidad borrados cuyas huellas rescatamos a través de citas y fuentes escritas, así como la influencia de la literatura latina, las literaturas vernáculas y el sistema de transmisión entre unas y otras. Contenidos Comiencen a rellenar a partir de aquí 1. La Edad Media en España: historia y contexto 1.a. Cronología y periodización Convencionalmente se denomina Edad Media al periodo comprendido entre los siglos V y XV y su comienzo se identifica con la caída del Imperio Romano de Occidente en el año 476. Sin embargo, no todos los historiadores están de acuerdo con esto. Algunos (Pirenne, Toynbee) retrasan el inicio de la Edad Media al siglo VIII, con la invasión de los árabes que, a diferencia de la llegada de los bárbaros, algunos de ellos fuertemente romanizados, sí supuso un corte radical. La cultura árabe se impondrá en el campo religioso, en el lingüístico y en el comercial (haránn desaparecer el comercio en el Mediterráneo, con el consecuente predominio de la actividad agrícola y el estancamiento de la vida urbana). Curtius, a su vez, toma como criterio la importancia que tiene la cultura legada por Roma y sitúa la „Edad Media Latina“ entre los siglos IX y XVI . El fin de la Edad Media se identifica generalmente con la caída del Imperio Bizantino en 1453, año en que los turcos invadieron Constantinopla, pero también en este punto hay discrepancias. Hay historiadores que sitúan el punto de inflexión en 1455 (invención de la imprenta de tipos móviles), en 1492 (descubrimiento de América) o incluso en 1571 (reforma protestante). Es importante recordar que„toda fecha o acontecimiento que se utilice, como criterio de segmentación histórica, tiene un valor puramente didáctico y pedagógico; es algo funcional y relativo“ (HLE, págs. 45-46) Se pueden distinguir tres periodos: 1) Edad Media temprana, que concluiría con la desmembración del Imperio de Carolingio a mediados del siglo IX. Hechos importantes:
La actividad cultural durante los inicios de la edad media consistió principalmente en la conservación y sistematización del conocimiento del pasado y se copiaron y comentaron las obras de autores clásicos. Se escribieron obras enciclopédicas, como las Etimologías (623) de san Isidoro de Sevilla, en las que su autor pretendía compilar todo el conocimiento de la humanidad. En el centro de cualquier actividad docta estaba la Biblia: todo aprendizaje secular llegó a ser considerado como una mera preparación para la comprensión del Libro Sagrado. Esta primera etapa de la edad media se cierra en el siglo X con las segundas migraciones germánicas e invasiones protagonizadas por los vikingos procedentes del norte y por los magiares de las estepas asiáticas, y la debilidad de todas las fuerzas integradoras y de expansión europeas al desintegrarse el Imperio Carolingio. La violencia y dislocamiento que sufrió Europa motivaron que las tierras se quedaran sin cultivar, la población disminuyera y los monasterios se convirtieran en los únicos baluartes de la civilización. 2) Alta Edad Media, agraria, feudal y monástica, en que predominan el arte prerrománico y románico (siglos IX-XII). Hechos importantes:
También se produjeron innovaciones en el campo de las artes creativas. La escrituran dejó de ser una actividad exclusiva del clero y el resultado fue el florecimiento de una nueva literatura, tanto en latín como, por primera vez, en lenguas vernáculas. Estos nuevos textos estaban destinadas a un público letrado que poseía educación y tiempo libre para leer. La lírica amorosa, el romance cortesano y la nueva modalidad de textos históricos expresaban la nueva complejidad de la vida y el compromiso con el mundo secular. 3) Baja Edad Media, más urbana y aburguesada, presidida por el gótico (siglos XIII-XV). Hechos importantes:
La espiritualidad de la baja edad media fue el auténtico indicador de la turbulencia social y cultural de la época. Esta espiritualidad estuvo caracterizada por una intensa búsqueda de la experiencia directa con Dios, bien a través del éxtasis personal de la iluminación mística, o bien mediante el examen personal de la palabra de Dios en la Biblia. Toda la población, laicos o clérigos, hombres o mujeres, letrados o analfabetos, podían disfrutar potencialmente una experiencia mística. Valoración histórica de la Edad Media Fueron los humanistas los primeros que usaron la expresión “media tempestas” para lo que ellos consideraban una etapa intermedia entre la Antigüedad Clásica y el periodo que estaban viviendo. Desde finales del siglo XV y hasta el siglo XVII recibió los apelativos “médium aevum“, “media tempestas” o “media etas” y fue visto como una época oscura y mediocre, de barbarie e ignorancia. Aunque durante estos siglos se llevaron a cabo algunos estudios sobre ella, la Edad Media era despreciada desde dos puntos de vista: el filológico, por haber olvidado la tradición greco-latina, y el de la religión, ya que la Reforma propugnaba una vuelta al cristianismo primitivo y el abandono de la tradición medieval. Este desprecio alcanzó su ápice en el siglo XVIII. Los ilustrados veían en esta "época detestable" barbarie, oscurantismo, inmovilismo e irracionalidad. Consideraban al clero medieval depravado y libertino y la sociedad feudal les parecía de un despotismo atroz. Esta visión negativa de la Edad Media cambió radicalmente en el siglo XIX. El Romanticismo conferiría prioridad a la sensibilidad y el sentimiento y pondría de relieve la exaltación del individuo y la vuelta a la naturaleza. Este movimiento empezó a elogiar el Medievo partiendo de la idea de que en ella habían triunfado las virtudes individuales y acabó mitificándolo. Otra corriente del s. XIX que fue decisiva para el redescubrimiento de la Edad Media en el siglo XIX fue el Nacionalismo, que buscaba en ella las señas de identidad específicas de cada pueblo, lo que los alemanes denominaron el “Volkgeist” o “espíritu del pueblo”. El interés por el Medievo creció también en el seno de la Iglesia católica, que veía en él un periodo de grandes personajes y obras caracterizado por la unidad, la paz y la armonía. La imagen generalizada que existe actualmente es una mezcla de estas dos posturas contrapuestas: por un lado se sigue identificando la Edad Media con una etapa de oscurantismo, opresión e intolerancia, herencia de los siglos XVI a XVIII, pero al mismo tiempo nos atrae y emociona profundamente, lo que explica la proliferación de manifestaciones como los mercados y espectáculos medievales, el éxito del canto gregoriano o el turismo religioso a templos medievales. La Edad Media en la Península Ibérica Hay un acontecimiento y una fecha especialmente significativos en la Península, pues marcan un antes y un después en el devenir histórico: la invasión del territorio peninsular por los árabes, el año 711, que acaba con el Reino Visigodo. Mientras en el norte se constituyen condados o reinos cristianos embrionarios, que con grandes dificultades resisten al invasor, el resto del territorio, que genéricamente se denominará Al-Andalus, pasa a formar parte de un emirato árabe con capital en Córdoba. Tabla I
1.b.Sociedad y cultura La sociedad medieval vive esencialmente del campo. El régimen de explotación agraria está condicionado por la estructura social de poder, basada en el señorío. El señor, seglar o eclesiástico, se encarga de la explotación del territorio anejo a su residencia, donde viven colonos, libres o siervos, que han de contribuir a su señor con los productos de la tierra y con su trabajo. Este régimen económico, dominante en la España cristiana, no admite una población muy densa. La superpoblación se evitaba desplazando campesinos para repoblar los territorios conquistados a los musulmanes, lo que impidió la configuración de un régimen estrictamente feudal, salvo en Cataluña, fuertemente influenciada por los modelos franceses. El enfrentamiento entre la ganadería, patrocinada por los grandes señores, y la agricultura, de la que viven los pequeños propietarios y los colonos, se prolonga a lo largo de todo el Medievo, resolviéndose en favor de los primeros con la creación en 1273 del Honrado concejo de la Mesta. La situación de los campesinos empeorará más y más, y en el siglo XIV se extiende a toda la península el ius male tractandi que concedía a los hacendado el derecho a maltratar a sus colonos. La sociedad medieval aparece rígidamente dividida en cuatro grupos mayoritarios o estamentos: |