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- La “Union” (Europea) que no quiere ser “Jack”: “British go home” (and God save the Queen) - ¿Es imaginable una Unión Europea sin el Reino Unido? - El Reino Unido y la Unión Europea “Este es un momento extraordinario en la historia de Europa. Hemos tomado decisiones de enorme importancia que expanden y extienden las fronteras de Europa, que convierten a Europa en una institución diferente, que la convierten realmente en una unión diferente para el futuro, y cuando miramos hacia atrás en la historia de Europa durante cientos de años y en particular en la historia del siglo XX y vemos la guerra, y la devastación y el desastre, y el conflicto y nos percatamos de que hoy estamos reuniendo a Europa, creo que es verdaderamente un momento del que podemos sentirnos orgullosos y que nos ofrece una inmensa esperanza para el futuro”. Primer Ministro Tony Blair, Copenhagen, Diciembre 2002 - Introducción Desde que era pequeño y me contaron “Caperucita Roja”, he aprendido que “no hay que jugar en el bosque mientras el lobo está”. Cuando ya era menos pequeño y en la escuela me enseñaron la “Leyenda del caballo de Troya”, he aprendido que “hay que tener mucho cuidado con los presentes griegos”. (Del mito - Fuente: Wikipedia) El caballo de Troya es un artilugio que aparece en el mito de la Guerra de Troya. Es mencionado en la Odisea de Homero (Octavo canto) y en otras fuentes como la Eneida de Virgilio (Libro II). El evento ocurre luego de los acontecimientos que se cuentan en la Ilíada de Homero y antes de los relatados en la Odisea y en la Eneida, pero igualmente es referida en estas dos últimas. Las fuerzas griegas que asediaron Troya durante diez años no pudieron superar las altas murallas que la defendían. Odiseo (Ulises para los romanos), el más astuto de los mortales propuso a los jefes griegos construir un enorme caballo de madera en cuya barriga han de caber los más valerosos héroes griegos. La flota griega se retiraría a la cercana isla de Ténedos, tras quemar el campamento para que los troyanos lo advirtieran y salieran confiados al campo. Un griego, fingiéndose fugitivo, quedaría fuera y contaría a los troyanos que este caballo está consagrado a la diosa Atenea, enemiga de los troyanos. Bajo las instrucciones de Odiseo el caballo fue construido por Epeo el feocio, el mejor carpintero del campamento. Tenía una escotilla escondida en el flanco derecho y en el izquierdo tenía grabada la frase: “Con la agradecida esperanza de un retorno seguro a sus casas después de una ausencia de nueve años, los griegos dedican esta ofrenda a Atenea”. Los troyanos, grandes creyentes en los dioses, cayeron en el engaño. Lo aceptaron para ofrendarlo a los dioses, ignorando que era un ardid de los griegos para traspasar sus murallas. Dentro del caballo se escondía un selecto grupo de soldados. El caballo era de tal tamaño que los troyanos tuvieron que derribar parte de los muros de su ciudad. Una vez introducido el caballo en Troya, los soldados ocultos en él abrieron las puertas de la ciudad, tras lo cual la fuerza invasora entró y la destruyó. Este episodio no es narrado en La Ilíada, el poema atribuido a Homero, que relata parte de la Guerra de Troya. Se hace alusión a él en La Odisea, en la que Homero cuenta las aventuras del héroe griego Odiseo en su regreso a su patria, Ítaca. También es aludido por Virgilio en la Eneida. Se ha sugerido que el Caballo de Troya podría ser una referencia a Poseidón, rey de las profundidades marinas y terrestres en la mitología griega, que contaba con el caballo como uno de sus símbolos. Durante la guerra de Troya, uno de los frecuentes terremotos que se producen en la región (atribuidos, por venir de las profundidades de la tierra, a Poseidón) pudo haber dañado parte del perímetro amurallado de la ciudad, facilitando así su toma por los griegos. Ya los mismos clásicos dudaban de esta artimaña. Pausanias decía que podría haber sido un arma de asedio parecida a un caballo que derribó la muralla. Otros decían que Antenor habría hecho entrar a los griegos en Troya por un postigo que tenía pintado un caballo. Otros autores creían que los griegos después de incendiar el campamento se habrían ocultado detrás del monte Hipio (“del caballo”). Robert Graves dice en su libro Los mitos griegos que Atenea habría inspirado a Prilis, hijo de Hermes, la idea del caballo, y que luego Ulises la había reclamado como suya. Pero esa es sólo una de las versiones del mito según Apolodoro e Higino. A propósito “cuentos” y “mitos” (mira tú por donde), deseo utilizar esta metáfora para introducir mi propuesta (base del presente Paper) de que la Unión Europea “conmine” (exija) al Reino Unido su incorporación “completa, total y absoluta” a la Unión Europea (con todas sus consecuencias) o “resuelva” su expulsión de la misma, de forma “irreversible” (con todas sus consecuencias). Dicho lo cual, quedan avisados los lectores de qué se trata, y pueden ahorrarse unas cuantas páginas para descubrir su desilusión. A los demás (los dispuestos al debate, los que tienen ilusión), les invito a que pasen y lean. Decía el politólogo Giovani Sartori, refiriéndose a Italia, que le preocupaban más los intereses de Silvio Berlusconi que todos los saludos y parafernalias fascistas. Y esta observación de Sartori es válida y extensible para otras geografías en las que lo político aparece afectado de metástasis económica. En los últimos tiempos, entre Schröder y Blair, entre Berlusconi y Aznar y otras abundantes figuras de menor importancia, han conseguido hacer de aquella Europa de la diplomacia estratégica y del equilibrio inestable una dinámica y eficiente, hiperrealista y políglota, escuela de negocios. Y es previsible, con tanta innovación, que el anciano Sartori comience a sentir bascas, oiga voces extrañas y duerma cada noche peor. Los ejemplos internacionales de intercambio entre empresa pública y privada son prolíficos. Tras abandonar Downing Street el pasado junio, Tony Blair fue contratado como asesor de JP Morgan y Zurich. Blair, que sólo con el primer cargo se embolsará más de un millón de dólares al año, sigue los pasos de su predecesor, John Mayor, contratado en 1998 por The Carlyle. Tampoco dejó pasar la ocasión el ex canciller alemán Gerhard Schröder que, tras perder las elecciones de 2005, aceptó la propuesta de Gazprom para presidir el comité de accionistas de Nord Stream, además de asesorar a Rothschild. En EEUU, el ex presidente de la Fed, Alan Greenspan, encontró trabajo en el mayor fondo privado de bonos, Allianz Pimco, mientras el ex secretario del Tesoro, John Snow, fue nombrado presidente de Cerberus y Robert Rubin, contratado por Citi, donde llegó a asumir las funciones de presidente interino. Destaca también la apuesta del fondo de capital riesgo Centaurus por Aznar como miembro de su consejo asesor, del que forma parte el ex ministro británico Ken Clarke. Entre todos estos “demócratas” nos están llevando a una crisis de imprevisibles consecuencias. ¿Usted aceptaría a Josef Frizl (el monstruo de Amstetten) como Director del Jardín de Infantes de su hija? ¿Usted aceptaría al General Augusto Pinochet al frente del Tribunal Penal Internacional? ¿Y entonces, por qué puede aceptar a Tony Blair (The USA submarine) como primer Presidente de la Unión Europea? “A veces, la única diferencia entre la verdad y la mentira es sólo un punto de vista” (Albert Einstein) En Macbeth, una tragedia que disecciona la ambición política, Shakespeare hizo famosa la descripción de la vida como “una historia contada por un idiota, lleno de rabia y de ira y que no significa nada”. A diferencia de Macbeth, el final no se ha escrito todavía, de manera que cabe confiar en que alguien ponga las cosas en su sitio, de modo que no acabe todo de mala manera. El Reino Unido, desde 1946 (ahí es nada), ha tomado como costumbre jugar al “ni contigo ni sin ti” con Europa. Una historia muy chocante. Muchos errores y muy pocas responsabilidades. - ¿Un “zorro” cuidando el gallinero? “Non” de Sarkozy a Blair (Redacción BBC Mundo - 7/5/08) El presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, retiró su apoyo a la candidatura del ex primer ministro británico Tony Blair, que aspiraba convertirse en el primer presidente de la Unión Europea, dijeron altas fuentes a la BBC. Se entiende que el mandatario francés cambió de opinión después de sostener una reunión con la canciller de Alemania Ángela Merkel. La teoría es que Sarkozy estima que la oposición de la Unión Europea contra Blair por su apoyo a la guerra en Irak es demasiado fuerte. (El subrayado es mío) El presidente será elegido por los líderes de los estados miembros de la Unión Europea. El cargo fue creado bajo el nuevo tratado de reforma de la UE. Las fuentes cercanas al presidente también indicaron que Sarkozy siente que Blair no sería el candidato adecuado porque Gran Bretaña no adoptó la moneda única europea ni la zona Schengen para el libre movimiento sin pasaporte. Otros candidatos En cambio, las fuentes señalan que el cargo podría ser adjudicado al actual presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, o al primer ministro de Luxemburgo, Jean Claude Juncker. El editor de asuntos europeos de la BBC, Mark Mardell, dice, sin embargo, que el gobierno británico no ve con buenos ojos a Juncker, a quien estima que está demasiado interesado en una mayor integración europea y el primer ministro británico Gordon Brown vetaría su postulación. Añadió que las apuestas más seguras están con el primer ministro danés Anders Rasmussen. El nuevo presidente presidirá las cumbres de la UE, asumirá algunas de las funciones del presidente del Consejo de la Unión Europea - que es un cargo de seis meses que se rota entre los mandatarios - y representará a la UE en política exterior y de seguridad común a todos los miembros. - La historia de la Unión Europea (La UE en breve) 1945 - 1959 Europa por la paz - los albores de la cooperación La Unión Europea nació con el anhelo de acabar con los frecuentes y cruentos conflictos entre vecinos que habían culminado en la Segunda Guerra Mundial. En los años 50, la Comunidad Europea del Carbón y del Acero es el primer paso de una unión económica y política de los países europeos para lograr una paz duradera. Sus seis fundadores son Alemania, Bélgica, Francia, Italia, Luxemburgo y los Países Bajos. Ese periodo se caracteriza por la guerra fría entre el este y el oeste. Las protestas contra el régimen comunista en Hungría son aplastadas por los tanques soviéticos en 1956; al año siguiente, la Unión Soviética toma la delantera en la carrera espacial al lanzar el Sputnik 1, primer satélite artificial. También en 1957 se firma el Tratado de Roma, por el que se constituye la Comunidad Económica Europea (CEE) o “mercado común”. 1960 - 1969 Los “vibrantes 60” - una etapa de crecimiento económico En los años 60 surge la “cultura joven”, avivada por grupos musicales como los Beatles que atraen a muchedumbres de adolescentes dondequiera que vayan, contribuyen a estimular una revolución cultural y agrandan la brecha generacional. Es un buen momento para la economía, favorecido, entre otras cosas, porque los países de la UE dejan de percibir derechos de aduana por las transacciones comerciales entre sí. También acuerdan ejercer un control conjunto de la producción alimentaria y, de este modo, se garantiza un abastecimiento suficiente que, incluso, llega a desembocar pronto en el excedente de producción agrícola. Mayo de 1968 es recordado por la revuelta estudiantil en París, y muchos cambios en la sociedad y los hábitos de vida se relacionan con la llamada “generación del 68”. 1970 - 1979 La Comunidad crece - primera ampliación El 1 de enero de 1973 Dinamarca, Irlanda y el Reino Unido entran a formar parte de la Unión Europea, con lo que el número de Estados miembros aumenta a nueve. La guerra árabe-israelí de octubre de 1973, breve pero brutal, da lugar a una crisis de la energía y a problemas económicos en Europa. Con el derrocamiento del régimen de Salazar en Portugal en 1974 y la muerte del general Franco en España en 1975 desaparecen las últimas dictaduras “de derechas” de Europa. La política regional de la UE empieza a transferir grandes cantidades para crear empleo e infraestructuras en las zonas más pobres. El Parlamento Europeo aumenta su influencia en los asuntos de la UE y, en 1979, es elegido por vez primera por sufragio universal. 1980 - 1989 Europa cambia de cara - la caída del muro de Berlín El sindicato polaco Solidarność y su dirigente, Lech Walesa, se hacen famosos en Europa y en todo el mundo tras las huelgas de los astilleros de Gdansk en verano de 1980. En 1981 Grecia pasa a ser el décimo miembro de la UE, y, cinco años más tarde, se suman España y Portugal. En 1986 se firma el Acta Única Europea, tratado que constituye la base de un amplio programa de seis años, destinado a eliminar las trabas a la libre circulación de mercancías a través de las fronteras de la UE, y que da origen, por ello, al «mercado único». El 9 de noviembre de 1989 se produce un vuelco político importante cuando se derriba el muro de Berlín y, por primera vez en 28 años, se abre la frontera entre las dos Alemanias, que se reúnen pronto en un solo país. 1990 - 1999 Europa sin fronteras Con la caída del comunismo en Europa central y oriental los europeos se sienten más próximos. En 1993 culmina la creación del mercado único con las «cuatro libertades» de circulación: mercancías, servicios, personas y capitales. La década de los noventa es también la de dos Tratados: el de Maastricht, de la Unión Europea, de 1993, y el de Ámsterdam de 1999. Los ciudadanos se preocupan por la protección del medio ambiente y por la actuación conjunta en asuntos de seguridad y defensa. En 1995 ingresan en la UE tres países más, Austria, Finlandia y Suecia. Los acuerdos firmados en Schengen, pequeña localidad de Luxemburgo, permiten gradualmente al ciudadano viajar sin tener que presentar el pasaporte en las fronteras. Millones de jóvenes estudian en otros países con ayuda de la UE. La comunicación se hace más fácil a medida que se extiende el uso del teléfono móvil y de Internet. El 1 de enero de 1999 once países (a los que se une Grecia en 2001) adoptan el euro para sus transacciones comerciales y financieras. Las monedas y los billetes se introducirán más tarde. Los países de la zona del euro son: Alemania, Austria, Bélgica, España, Finlandia, Francia, Grecia, Irlanda, Italia, Luxemburgo, los Países Bajos y Portugal. Dinamarca, Reino Unido y Suecia deciden mantenerse al margen por el momento. Desde 2000 Prosigue la expansión El euro es la nueva moneda de muchos europeos. El 11 de septiembre de 2001, en que unos secuestradores aéreos estrellan varios aviones en edificios de Nueva York y Washington, pasa a ser un referente en la “lucha contra el terrorismo”. Los países de la UE comienzan a colaborar más estrechamente contra la delincuencia. Cuando, en 2004, diez nuevos países ingresan en la UE, las divisiones políticas entre la Europa del este y del oeste se dan por zanjadas definitivamente. Muchos europeos creen que ha llegado la hora de que Europa tenga una Constitución, pero no es nada fácil llegar a un acuerdo sobre qué tipo de constitución es el adecuado, y el debate sobre el futuro de Europa sigue candente. - Economía del Reino Unido (Fuente: Wikipedia) Durante el siglo XIX el Reino Unido superó en renta per cápita a los demás países europeos, superando ampliamente a Francia y Alemania que tenía rentas per cápita similares entre sí. Hacia 1920 la renta per cápita británica fue superada por la estadounidense aunque tras la crisis de 1929, la economía norteamericana fue más afectada que la británica. Historia económica reciente Tras la Segunda Guerra Mundial y la pérdida progresiva de las colonias, el país retomó el rumbo como potente economía manteniendo una doble alianza que dura hasta nuestros días: no perdió su mirada económica sobre Europa, pero al mismo tiempo reforzó sus relaciones comerciales con Estados Unidos que tras el conflicto ejerce como primera potencia mundial. Este papel económico le ha permitido mantener un sólido y constante desarrollo a lo largo de la segunda mitad del siglo XX. En 1960 y 1966, el Reino Unido trató de incorporarse a la CEE sin éxito, sobre todo por la oposición de Francia esta en venganza ya que el Reino Unido no quería que Francia fuera considerada una nación victoriosa después de la segunda guerra mundial cosa que no ocurrió ya que la Francia de Gaulle fue considerada una de las potencias del momento, hasta que en 1970 su candidatura fue admitida. En 1973, gracias a la política europeísta del Primer Ministro Edward Heath, ingreso en la Comunidad Económica Europea. Durante las décadas de los 1950s hasta los 1970s, la economía británica mantuvo un alto nivel de presencia del sector público, llegando incluso a representar entre el 35 y el 40% del total del Producto Interior Bruto. La llegada de la conservadora Margaret Thatcher al poder conllevó la aplicación de políticas neoliberales que redujeron el papel del Estado y afectaron al modelo del sistema de protección social. Con posterioridad, las distintas políticas han recuperado parcialmente la situación anterior a 1979, procurando mantener una economía ágil y competitiva con unos niveles de bienestar amplios para la población. Los distintos sectores económicos. Como en todos los países altamente desarrollados, los principales factores en contra de la economía del Reino Unido lo representan los altos salarios y la fuerte presencia en los sectores de manufacturas e industria pesada de los países emergentes, sobre todo China, Taiwán, India y Corea del Sur. La agricultura representa únicamente el 1% del PIB y contribuye apenas con el 2% del PPP. Altamente mecanizada, sus principales producciones son de patatas, remolacha, trigo y cebada. La ganadería es también significativa, sobre todo la ovina y la bovina, siendo un gran productor europeo de leche y sus derivados. La pesca, sin embargo, sufre un proceso de reconversión agudo, al igual que el resto de las flotas de los países de la Unión Europea debido a la disminución del volumen de pescado en los caladeros tradicionales. En la industria, las principales actividades son la maquinaria, el material de transporte (vehículos, ferrocarriles y aeronáutica) y los productos químicos. El alto desarrollo tecnológico y las grandes sumas destinadas a investigación hacen que la economía británica goce en estos de buena salud. Los sectores en crisis son el textil y el naval. La minería siempre ha representado un sector muy importante en la economía. Las tradicionales minas de carbón en forma de hulla situadas en Yorkshire, Gales, Escocia y Lancashire han suministrado a las centrales térmicas británicas la energía necesaria para el desarrollo económico. Aunque en la actualidad su peso específico es menor, siguen siendo parte fundamental de la economía. No obstante, el Reino Unido es el 8º productor mundial de gases contaminantes provenientes del consumo de combustibles fósiles, por lo que como signatario del protocolo de Kyoto ha realizado un programa específico de reducción de dichos gases hasta 2017. Con el descubrimiento en 1970 de reservas abundantes de petróleo y gas natural en el Mar del Norte, se inició la explotación comercial en 1975 y, en la actualidad es el segundo productor europeo, tras Noruega. En materia energética, dispone igualmente de centrales nucleares que abastecen de energía a la población y las empresas, así como aseguran el mantenimiento de su capacidad militar nuclear. El Reino Unido fue el primer país del mundo en poner en funcionamiento una central nuclear para fines civiles en 1956. El sector servicios es el que más aporta el PIB del país, destacando entre ellos la Bolsa y los servicios financieros banca y compañías de seguros. La Bolsa de Londres es la segunda plaza financiera mundial tras la de Nueva York, y la capital británica es la ciudad europea con más actividad en el mercado de capitales. La otra gran capital financiera e industrial del Reino Unido es Edimburgo donde se sitúan importantes empresas del país y mundiales. Aunque integrado el país en la Unión Europea, el llamado “euroescepticismo” tradicional de los británicos le mantiene fuera de la zona euro, siendo la divisa del país la Libra esterlina. Existe un compromiso del Primer Ministro Tony Blair para celebrar un referéndum que determine si el Reino Unido se integra o no en la moneda única. Datos económicos básicos del Reino Unido. El Reino Unido es la sexta economía del mundo, después de la de Francia y mantiene desde la Primera Guerra Mundial la disputa con Alemania y Francia por ser la primera economía europea. Se le considera uno de los países más desarrollados del mundo. PIB - Producto Interior Bruto (2003): 1.585.000 millones de €. (1.910.100 millones de dólares) Paridad de poder adquisitivo (2004): 1.440.000 millones de €. (1.782.000 millones dólares) PIB - Per capita: 26.290 € (31.100 dólares). Paridad del poder adquisitivo Per capita (2004): 25.650 €. (30.300 dólares). Inflación media anual: 1,3%. Deuda externa aprox. (2003): n/d Importaciones (2002): 433.000 millones de dólares. Principales países proveedores: Alemania, Estados Unidos y Francia. Principales productos de importación: Manufacturas, y alimentos. Exportaciones (2002): 352.000 millones de dólares Principales países clientes: Alemania, Estados Unidos y Francia. Principales productos de exportación: Manufacturas, alimentos y petróleo. Estructura del PIB en 2002: Distribución por sectores económicos del PIB total: Agricultura, Selvicultura y Pesca: 1%. Industria y construcción: 27%. Industrias manufactureras y minería: n/d Servicios: 72%. Tasa de paro (2004): 4,8%. Población por debajo del nivel de pobreza (2002): 17%. Comercio de bienes y servicios (Fuentes: Examen de las políticas comerciales de la OMC, Comunidades Europeas, Informe de la Secretaría, parte 2, 2004 / The Economist - Elaborado por: CICO-CORPEI) Desde la adhesión del Reino Unido a la Unión Europea, este país ha incrementado su comercio con los países europeos, mientras que el comercio con Norte América y los Países de la Commonwealth se han reducido como una proporción del total. Estados Unidos es todavía el mercado líder del Reino Unido, tomando el 18.3% del total de las exportaciones en el 2003. Otros mercados importantes son: Alemania, Francia, y Los Países Bajos. Alemania fue el proveedor líder de este país en el 2003, seguido por Francia y Países Bajos. Japón, Suiza y China son otros socios comerciales importantes del Reino Unido. Comercio de bienes Sin tomar en consideración los intercambios intracomunitarios, las CE siguen ocupando el primer lugar del mundo en la exportación de mercancías (con un 20 por ciento en 2002) y el segundo lugar en la importación (19 por ciento). Individualmente, Alemania ocupa el segundo lugar como país exportador de mercancías, mientras que Francia ocupa el quinto lugar y el Reino Unido, el sexto. Alemania también está en segundo lugar en el mundo por sus importaciones de mercancías, seguida por el Reino Unido y Francia. Entre los C-10, Polonia es el país con mayor intercambio de mercancías; le siguen la República Checa y Hungría. Sobre la base de los valores de los intercambios mundiales de 2001, los C-10 acrecentarán la proporción de los intercambios intrarregionales de las CE en el total de su comercio de mercancías llevándolo de cerca del 62 por ciento al 67 por ciento, mientras que la participación de las CE en las exportaciones mundiales de mercancías (incluidas las corrientes intracomunitarias) alcanzará un 41 por ciento. Sin incluir el comercio intracomunitario, la participación en las exportaciones mundiales de mercancías se sitúa alrededor del 20 por ciento para las CE-15, y del 18 por ciento para las CE-25. Las perturbaciones externas, como las causadas por los altos precios del petróleo y su inestabilidad, las tensiones geopolíticas y la recesión económica mundial, han afectado negativamente al comercio de las CE. La apreciación del euro perjudicó en alguna medida la competitividad de las exportaciones de las CE en los precios. En 2003, las exportaciones (extracomunitarias) de mercancías de las Comunidades Europeas alcanzaron los 976.200 millones de euros, frente a 882.500 millones en 2001; y sus importaciones de mercancías aumentaron de 920.700 millones de euros en 2001 a 987.800 millones en 2003. El déficit de las CE-15 en el comercio de mercancías disminuyó de 38.200 millones de euros en 2001 a 11.600 millones en 2003. Los Estados Unidos siguen siendo el principal interlocutor comercial de las CE-15, correspondiéndoles un 23,9 por ciento de sus exportaciones de mercancías en 2002 (porcentaje inferior al de 2000, de 24,4 por ciento) y un 17,5 por ciento de sus importaciones (frente a un 19 por ciento en 2000). Suiza es el segundo entre los destinos más importantes de las exportaciones de mercancías de las CE (7,1 por ciento del total en 2002), y China sigue siendo la segunda fuente más importante de sus importaciones (8,3 por ciento del total en 2002, frente a un 6,8 por ciento en 2000). Mientras que la participación del Japón, tanto en la exportación como en la importación de mercancías de las CE, ha tenido cierta disminución, la Federación de Rusia ha aumentado su importancia como interlocutor comercial de las CE. En 2003, se estimaba que correspondía a los Estados Unidos un 22,6 por ciento de las exportaciones de mercancías de las CE-15 y un 15,3 por ciento de sus importaciones, mientras que las CE-15 recibieron de la República Popular China un 9,6 por ciento de sus importaciones de mercancías. El grueso de las exportaciones de mercancías de las CE-15 en 2002 estuvo constituido por maquinaria y equipo de transporte (45,5 por ciento, frente a un 46,6 por ciento en 2000), seguidos por los productos químicos (15,4 por ciento), otros productos semimanufacturados (9,2 por ciento), productos de la agricultura (6,8 por ciento), textiles y prendas de vestir (4,3 por ciento) y productos de la minería (4,3 por ciento). Las importaciones de mercancías de las CE-15 consistieron en 2002 principalmente en maquinaria y equipo de transporte (36,1 por ciento, frente a un 38,2 en 2000), productos de la minería (17,6 por ciento), productos de la agricultura (9 por ciento), productos químicos (8,2 por ciento), textiles y prendas de vestir (7,4 por ciento) y otros productos semimanufacturados (6,7 por ciento). Se ha estimado que en 2003 correspondió a maquinaria y equipo de transporte un 47,5 por ciento de las exportaciones de las CE-15 y un 44,1 por ciento de sus importaciones. Comercio de servicios Las CE-15 ocupan el primer lugar en el mundo por su comercio de servicios. Sin incluir el comercio intracomunitario, esos intercambios representaron en 2001 el 25 por ciento de sus exportaciones y el 23,8 por ciento de sus importaciones. No obstante, la libre circulación de servicios dentro de las CE ha de mejorarse aún más. Por otra parte, el comercio de servicios de las CE-15 se ha visto afectado, entre otros factores, por la apreciación del euro y el temor suscitado por el terrorismo después de los ataques del 11 de septiembre de 2001. En efecto, los ingresos derivados de los viajes (exportaciones) se redujeron de un 24,2 por ciento del total de las exportaciones de servicios de las CE-15 en 2000 a un 20,9 por ciento en 2002, mientras que la apreciación del euro durante 2002-2003 también frenó los viajes, tanto de turistas que se desplazan a las CE como de turistas de las Comunidades. En el año 2002, las CE-15 exportaron servicios por valor de 751.100 millones de euros (incluido el comercio intracomunitario), con un incremento del 10,2 por ciento respecto de 2000, y los importaron por valor de 734.000 millones de euros (con incremento de 9,1 por ciento respecto de 2000). Individualmente, el Reino Unido es el segundo mayor exportador de servicios del mundo, seguido por Alemania y Francia. En materia de importación de servicios, Alemania ocupa el segundo lugar en el mundo, el Reino Unido el cuarto y Francia el quinto. Entre los C-10, Polonia es el país con mayor comercio de servicios (32º lugar en el mundo en 2002), seguida por Hungría y la República Checa. Inversiones (Fuente: The Economist - Elaborado: CICO-CORPEI) El Reino Unido constituye la base más larga para las compañías no pertenecientes a la Unión Europea que establecen sus operaciones en Europa y es el gran repositorio en Europa para las inversiones desde Estados Unidos y Japón. Este mercado capta el 40% de la inversión estadounidense y japonesa en la Unión Europea. Además, el Reino Unido también atrae inversiones desde Alemania y los Países Bajos principalmente. El procedimiento para establecer una compañía en este país es idéntico para los inversionistas británicos como para los extranjeros. No existe ningún mecanismo de aprobación para la inversión extranjera; los inversionistas pueden libremente establecer o comprar empresas en el Reino Unido así como también adquirir terrenos o edificios. Las mayores regulaciones para los inversionistas directos, especialmente para aquellos que planean adquisiciones, provienen de Bruselas más no de Londres. Para la mayoría de las partes, estas reflejan la responsabilidad de la Comisión Europea para fusiones transfronterizas que pueden llevar a la construcción de monopolios. Así mismo, tiene el fin de controlar las prácticas que interfieren con el comercio intra- Unión Europea. La propiedad extranjera es limitada para unas pocas compañías privatizadas estratégicamente. Teóricamente, el gobierno puede bloquear la adquisición de activos industriales de afuera a través de la invocación del Acta de Industria, pero nunca lo ha llegado a realizar. Además, pueden existir ciertas limitaciones en lo que respecta al número de acciones que un individuo o grupo puede poseer. Las inversiones en energía y generación de poder requieren aprobaciones ambientales y ciertas actividades de servicios (como radio y transmisión de televisión) están sujetas a licencias. Aunque sorprenda, confieso mi “admiración” (¿sana envidia?) por el Reino Unido. Admiro su capacidad de “hacer de la necesidad, virtud”, su creatividad para haber pasado de ser un país colonialista a ser un país manufacturero, y de ser un país manufacturero a ser un país de servicios, y de ser un país de servicios a ser un casino, reino de la especulación absoluta. Y todo ello, en nombre de la “libertad de mercado”. Esto sí que es “flexibilidad”. Todo lo que haga falta para prolongar la “ilusión” de riqueza, los privilegios de clase y continuar medrando. Los “mercaderes” de Adam Smith, devenidos en “croupiers” de casinos, “corredores” de apuestas, operadores de mesas de dinero, agentes bursátiles, brokers, traders, dealers, blanqueadores, banderas de conveniencia, gestores de paraísos fiscales… De las blancas pelucas hechas con crin de caballo y las anticuadas togas, a la Barbie Victoria Beckham con sus implantes y minifaldas. Unos “maestros” en el arte de la “reconversión”. ¿Hipocresía? ¿Cinismo? ¿Realismo? ¿Pragmatismo? ¿Ficción? ¿Falsificación? ¿Travestismo? ¿Eufemismo? - De la historia reciente (BBCMundo.com - |