A Mónica Un individuo cualquiera decidió suicidarse






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Y tu mano es mi mano ahora

  • poemario del lagarto -


manolo arboccó

a Mónica

Un individuo cualquiera decidió suicidarse

en un lugar cualquiera de Lima

ya tenía todo pensado

estaba decidido

y a pocos minutos

algo” lo detuvo.

¿éros, miedo, esperanza, culpa?

Este poemario esta dedicado a ese “algo”

I

Tu inocencia morirá a los 14

No creo en tus mediecitas blancas con corazones de colores

tu inocencia me es repugnante

tu ignorancia es tan falsa

que quisiera bañarte

con mi inmundicia

con mi malicia

con mi desamor hacia el resto

misantropía pura de mi infierno

con mi lado humano

ese que tanto se niega

ese que tanto quisieras.

Puedo convivir contigo

sólo por espacios cortos

luego el afecto se invierte

luego el fastidio aparece

no te soporto esos días

si solamente pudieras comprender

que el retirarse es necesario para amar

si me saturo de ti te odiaré

y no quiero odiarte

porque creo,

creo que tal vez

sólo algunos días

estoy en capacidad de decir

que te quiero mucho

Eso es bastante.

No puedo dar más.

II

El espejo

Luces de un infierno que se oculta

en una sociedad feroz que intenta vestirse bien

veo a través de los cuerpos de mármol

todos se arreglan, se asumen narcisos

las opciones del dolor son mayoría

del dolor infecundo, estéril.

Nada crece de hierba mala

la hierba buena escasea

la poca que hay va en tu cara y en mi pena

y escapa por las fauces que limitan

el espejo queda chico en estos días

en vez de sangre, sólo fuego en las venas

y el rostro rojo de la furia en la oficina

las noticias no me gustan

puro llanto

todo es fuego

el espejo nos saluda en las mañanas

esperando salga todo como manda

el espejo nos despide a la pasada

rogando no lo rompamos por la rabia.

El espejo nunca engaña

nosotros somos los que queremos verlo diferente.

III

Emera

Trato de ser indiferente a toda esta alegría efímera

y por lo efímera deleznable,

engañando burdamente al ser triste que mueve nuestros hilos, hilachas.

Me defiendo con lo que puedo

con lo que puedo pateo

imaginariamente tu vientre,

y tu rostro nervioso.

A veces quisiera salir de aquí adentro

mi carne es muy poco para mí

a veces, cuando soy esencial.

Hoy quisiera hacerte el amor

y mañana despertar en otro lado,

en otra casa, con otra mujer, con otra vida

y con otra materia.

Creo que mi tonta alegría se debe

al suponer que estoy bien

IV

Sólo segundos

Los deseos de dormir sobre el efecto

de la infusión imaginaria,

tomo contacto con lo que me topo

eso no existe sin mí

soy importante para mí

sensible como la primera cuerda de la guitarra

que al llegar a un tono más, voló

pero te amo

te lo puedo asegurar

no necesito mentir para saberme vivo

puedo ver tu cabello a distancia

puedo oler tu sexo a millas

desearte tanto que me empape

y querer destruir las paredes de mi cárcel

y querer doblar los barrotes que me encierran

la vida sólo es valorable cuando entiendes que el control no es tuyo

vivimos sólo segundos

el resto es una fábula tonta

vivimos para dormir de pie

como la ventana que se cierra para entender

que es de noche cuando los lobos ven mejor

no puedo acercarme a ti

de verdad no puedo

me es difícil pues estoy muy enfermo

he sido contaminado de una conocida enfermedad

llamada cotidianidad

por eso estoy buscando algo

sea en libros o en mis sentidos

pero te advierto puedo escuchar

los murmullos de las arañas por debajo de la tierra,

el abrir de las entrañas de los gatos que aborrezco

y la música entra y tomo contacto

eres bonita cuando bailas sin ropa

sin ropa saltaré del puente

sin ropa almorzaré un menú de pastillas

y beberé un mar de alcohol

hasta caer de rodillas ante ti

y verme tan lento, tan tonto, tan contento,

tan menos cotidiano

vivimos sólo segundos

el resto es un cuento tonto para niños tontos

tengo que respirar aire que no sea éste

tengo que salir de mi cuerpo de una vez

me siento con una energía inmensa

pero sólo por unos segundos que me permito para escribir

más tarde estaré despierto en este mundo loco

en esta sociedad de mierda y de mierdas

tú eres linda

y yo también.

V

Tres veces mi amor

Tus labios son gruesos y pesados y distorsiono al verlos mi pensamiento

imagino una vagina con tu boca

y en tu sexo una lápida bonita.

Unas veces la entrada a un paraíso

mi boca abierta expulsa el aire del cansancio

del orgasmo momentáneo y pasajero

pasajero del silencio, muerte lenta

no me basta la rutina tonta de tu Lima

no me siento peruano

no me siento mundano

quiero la soledad con mis cosas peligrosas

pero para expandir la mente

no para escapar

ningún niño bueno ha pasado a la historia

por portarse como la mama dijo,

los pecados escriben la historia, el bien es silencioso, gritó Goethe.

Ellos blasfeman

yo quiero escribir mi historia con tus gritos

del bienestar que brindarte pueda.

Tres veces mi amor, tres veces para amarte

sigue el coro de los ángeles perdidos

nos ve nuestro padre desde entonces

y es la forma del amor lo más brillante

sólo abrázame y nada más digas

no pronuncies palabra alguna

sólo un abrazo hasta que el despertar nos separe

pero ya a esa hora estaremos muertos de cansancio.

Le ganamos la batalla a la mañana.

miremos el techo y mientras tanto

no digamos nada

nada.

VI

Leguas, lenguas y heridas

Se envenena en la avenida la marea

de la gente que hierve y huele mal

a siete leguas

el sudor por la garganta se desliza

alcanzando el pecho cubierto de grasa

de la nada el aluvión por la ventana

es el grillo el que canta muerto de miedo

doblemente tus ojitos bien abiertos

si te arrancan con el brazo la cartera.

Caos negro es un hecho

nunca es blanco

el escudo ni de piedra lo contiene

y bajo el odio se esconde ese fracaso

y la envidia de la ausencia por el que todo tiene tanto

siete lenguas del fuego en el asfalto

que caliente la ciudad con mucha fuerza

van muriendo los pastores por las llagas

de las plantas de los pies que ya no existen

si el amor bastara no exigiría

la utopía del país con maravillas

sí tu amor realmente existiera

no escribiría ni pensaría en la protesta

no existes más que en mi inconsciente,

complaciente hasta el cansancio con tu cuerpo

si tu cuerpo me bastara pediría

ser un nervio flotando a la deriva

¿alguien dijo siete heridas?

VII

Arena Blanca

El caballero lagarto me lo dio una noche

lo puso sobre mi viejo piano

vi una flor en un florero café

llevaba un lazo de un color que no combinaba

pero ahí estaban,

sobre ti,

sobre el piano

Intenté ser generoso y le di de beber de mi vaso

a varios metros se podía oler a alcohol

pensé que la perforaría

me equivoqué, lo soportó

y lo llevó dentro de él

murmuró te quiero igual

era la canción del sucio calamar

olor a sexo y a cigarrillos mojados

sin filtro

puro rojo

puro fuego

No viviré tanto la próxima vez

lo suficiente para no perderme el color de tus ojos

poder oír tus gemidos nocturnos

hay tanto ruido y mis oídos ya no oyen

todo parece el residuo caótico de algún dios pobre

sobre un fondo naranja que promete

puro rojo

puro fuego

algún dios rico quiso mentirme

lo engañe

algún dios fuerte quiso protegerme

lo dañe.

Soy arena

de un desierto que no existe

o que para ser más exacto

de un desierto que ya no existe más

el sol secó la lluvia

que iba en el vaso

en plena tertulia

Sin serpientes

ni soles quemadores

todo suave

respiro la brisa

no soy el hijo de mi padre y de mi madrastra

soy un ser nuevo

luego de mi nuevo bautizo

y de mi soñada muerte

mi propia belleza envuelta

en nada más que una suave sábana

cobija mi cuerpo y algo así como mi alma

mi nueva religión es calma

y pesa más que tu endeble puente de fe

con el que esperar llegar a tu propio soborno

hecho promesa ajena.

VIII

El poder de manipular la vida

Tuya es la culpa eterna

porque naciste hombre sufrirás

intentarás ocultar tu lado malo

buscarás ignorar tus pecados

Marcan trece los relojes

del calvario sin la cruz

ya jugaron a los dados

ya robaron a tu dios

Te herirán en el costado

con una lanza de fuego

y parirás a tus hijos

llenos de taras y huecos

Y en la santa casa habitarán

menos humanos más necios

se encargarán de mentirnos

y llenarnos para siempre de miedos

La promesa será esperar pacientemente

dos mil años más, ya tienen el poder

te pedirán tu diezmo de consciencia

te golpearán el alma si intentas fornicar

Ni ellos mismos creen todo lo que dicen

la simpatía no está sujeta a voluntad

la fe y la razón no son compatibles

un vistazo al pasado y al presente

cielo e infierno están aquí

no busco más

no espero en vano

pero al igual que tú

necesito aferrarme a algo.

¿dar la otra mejilla?

Pamplinas.

IX

Llegará

Dinamitan tu cerebro con violencia

desde la puerta del horno si te empujan

comerás tu sudor con esa sangre

la maceta sobre su cráneo danza

La pendiente es peligrosa y es propicia

para dar un volantín si es necesario

romperás tu existencia contra el mundo

contra el fémur fracturado en tu mejilla

Muy despacio, lentamente y de a poquitos

vas sintiendo que la hora se aproxima

aparece en tu rostro la agonía

es la muerte, doce pasos son la vida

No se apura, la malvada no se apura

X

Lagarto

Yo me fui un día con la señora

subí a su balsa de madera que era frágil

temí caer por la borda

temí ser presa del lagarto

me vi en medio de un río negro

sólo burbujas por un manantial caliente

parecía el origen de la vida

el camino del café nos da la bienvenida

sobre la copa del árbol una promesa

la culebra juguetona serpentea

me provoca con ese cuerpo al denudo

el puñal de la abeja aguijonea

Huele a estiércol tu cerebro tan chiquito

El pensamiento de tu madre aún no te deja

Por la borda echaré lo que me sobra

Si me fastidias serás presa del lagarto

XI

Es mi sudor lo que se prende de tu mejilla

Te beso mientras comes

como niña educada te alimentas

te enseñaron lo apropiado y lo aprendiste

la lección fue asimilada con lisuras

Te beso mientras duermes

descansando del orgasmo producido

ya en tu cuerpo mis espermas iniciaron

la loca carrera por el óvulo maduro

y mientras duermes sueñas

y en tu sueño también te toco

sólo que esta vez la escena es blanquecina

y en vez de cotidiana sólo una vida enloquecida

Te beso mientras mueres

y es mi sudor lo que se prende de tu mejilla

y hacia allá te llevarás lo que era mío

mi corazón murió contigo con esa bala

Me besaste aquella noche en la cornisa

y me diste la fuerza para evitar el salto eterno

con ese toque de mujer-mamá-maestra

con que le diste vida a mi ridícula existencia

Nos besamos…y luego nos fuimos

XII

Ya estaba así cuando yo llegué

¿Todo es efímero?

frente a la vela mi rostro

creo que ya te escribí que no te soporto

quisiera beber esta noche

hasta embriagarme

y bailar desnudo en tu jardín

y que tus padres me corran

orinarme luego en la oficina

hasta que el puto dueño me bote

no importarme nada por tan sólo un segundo

o una diezmilésima tal vez.

Sentir el amor más ligero menos plúmbeo

mi amor para contigo

que pena si luego hay que despertar

con nada a mi alrededor.

Los espero medio muerto

XIII

Rehenes

Sucio poeta, recorres las calles

bebiendo toneles, pateando rivales

Loco poeta, doblas las esquinas

mirando a las niñas, violando ideales

Maldito poeta, detienen tu paso

no más lagartijas, rehenes del aire

Lejano poeta, recorres la vida

escupiendo en aceras, lanzando verdades

XIV

Suave suicida

Villanas son las palmas de tus manos

y un verdugo en ese loco corazón

se encienden las señales de tu frente

se deslizan los sudores impregnados de temblor

siempre atento al llamado de la muerte

es tu almohada ese sucio camisón

con la vida descansando en un minuto

no te muevas, un nuevo riesgo, un viejo temor

no te agites, la verdad es traicionera

mejor canta un poquito esa canción

no te agites, esta noche es peligrosa

no te agites, mañana –quizá- tu dolor sea un mal menor

XV

Cirilo y los amigos de Lacan

Hoy no quiero hablar y por eso escucho,

hoy no puedo escribir sin embargo escribo.

Estoy separado de mí. Y me veo, desde el cuarto contiguo, dormir:

luego del mismo plato comemos ambos.

Mi cuerpo y yo.

¡Saltemos del barco! –que se hunde-

y tratemos, como podamos, de llegar a la orilla.

Sólo las aves nos esperan en el dormitorio hecho sopa.

También el silencio es mortal

y en la tumba no entramos todos.

Algunos pedirán un minuto para fumar, otros se arrepentirán

y (de verdad) dará asco verlos llorar,

y los demás, los “más” los sinvergüenzas pedirán entre gritos

“que una vez comience el baile”.

Pero yo (que aún afuera veo todo) del cielo ya no espero nada,

porque sólo recibo lluvia

o mierda de pájaro.
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